Las prestaciones sociales para personas mayores en Balears son deficitarias, según revela un estudio realizado por un equipo multidisciplinar por encargo de la Conselleria de Benestar Social.
La consellera de Benestar Social, Fernanda Caro, presentó ayer los resultados del diagnóstico sobre la situación de las personas mayores que, realizado en base 1.200 encuestas a personas de más 65 años y en los datos demográficos de 1996, año en el que había 113.083 mayores, lo que representa el 14'87 por ciento de la población balear.
«Este análisis constituye una herramienta fundamental para elaborar el Plan Estratégico para personas mayores, que estará detallado y presupuestado antes del próximo mes de abril», aseguró Caro. El informe revela que las carencias más importantes se centran en los servicios de ayuda a domicilio y los de teleasistencia, que tan sólo llegan al 2'2 y al 0'4 por ciento de la población mayor, respectivamente, así como en la escasa implantación de los centros de día, a los que acuden un 0'14 por ciento de los ancianos.
La directora del Institut Balear d'Afers Socials, Josefina Santiago, explicó que todos estos porcentajes están por debajo de lo recomendable, que se sitúa entre un 3 y 5 por ciento.
Al respecto, comentó que el Plan Integral para las personas mayores dará prioridad a las acciones dirigidas a cubrir estos carencias sociales. Según dijo, las enfermedades cardiovasculares y el cáncer constituyen las principales causas de mortalidad de la tercera edad, con incidencias del 43'4 y el 21'2 por ciento, respectivamente.