El ejercicio 2000 puso de manifiesto la finalización de la tendencia al alza de la promoción de edificación de vivienda nueva en la Isla, según constata el Colegio de Aparejadores de Mallorca por el número de proyectos visados. Para el presidente del Colegio de Aparejadores de Mallorca, Jaume Gibert Salamanca, «hemos iniciado en Mallorca un proceso de ralentización en cuanto a la plasmación de nuevos proyectos, que contrasta con la evolución habida en los ejercicios 1998 y 1999, lo que demuestra el comportamiento a la baja del sector de la construcción y de la promoción inmobiliaria para este año y 2002».
Gibert añade que en el primer semestre de 2000 «se apreció un ligero repunte al alza del número de visados, pero fue a partir de agosto cuando se comenzó a vislumbrar que la edificación nueva en la Isla había llegado al límite, confirmándose en el último cuatrimestre esta tendencia a la baja, finalizando el año con un descenso del 1 por ciento del número de visados».
Esta recesión se aprecia de manera especial en los municipios del litoral de la Isla, aunque todavía continuará, de acuerdo con los proyectos visados, en Marratxí, Cala Blava y en las urbanizaciones de Son Xigala y Montesión de Palma. El efecto más inmediato es la caída de actividad en chalets y viviendas unifamiliares, que dejan de predominar ante el empuje de las plurifamiliares que están siendo construidas por constructoras procedentes de la Península en lo que respecta a las grandes y medianas promociones.
El Colegio de Aparejadores, sin embargo, puntualiza que esta evolución «es positiva porque no podíamos seguir con la dinámica actual, que era totalmente contraproducente por lo que implica en materia de consumo de territorio. En los años 1998 y 1999 se produjo una avalancha de proyectos visados, cuyo desarrollo ha mantenido la actividad durante el pasado año, de ahí el elevado número de viviendas terminadas, un 15 por ciento más respecto a 1999. Esta actividad continuará a lo largo de este año, pero está claro que cada vez se registrarán menos visados y esto hará que el sector de la construcción de vivienda nueva en las Islas registre una recesión a finales de año. Nuestras previsiones apuntan que durante 2001 habrá un 15 por ciento menos de visados de viviendas que en 2000».