El presidente del Govern balear, Francesc Antich, agradeció a los ancianos residentes en la Bonanova «el trabajo realizado para conseguir que podamos contar con una sociedad más justa» y abogó por la ampliación del servicio de ayuda a domicilio y la mejora de los servicios sociales.
Antich hizo estas afirmaciones en la visita que llevó a cabo, ayer por la mañana, a la residencia de la Bonanova, acompañado por la consellera de Benestar Social, Fernanda Caro, el director general de Presidència, Pere Fullana y la gerente del Institut Balear d'Afers Socials (Ibas), Josefina Santiago. Las autoridades fueron recibidas por el director de la residencia, Rafael Amengual y una amplia representación de la junta de residentes de la Bonanova.
«Vamos a seguir luchando desde la Conselleria de Benestar Social conjuntamente con las otras instituciones para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos», dijo Antich y recordó que «desde el Govern intentamos facilitar al máximo que los ciudadanos de todas las edades pueden continuar viviendo en sus casas. Por ello hemos aumentado el servicio de ayudas a domicilio», comentó el presidente.
La visita de las autoridades fue recibida con expectación por los residentes. La Bonanova cuenta con 532 residentes, 300 asistidos y 232 válidos, que acogieron la visita de Antich y el resto de autoridades como si se tratara de un día festivo, merienda incluida. La consellera de Benestar Social, Fernanda Caro, también departió con los residentes y comentó las mejoras realizadas en la Bonanova para hacer más feliz la vida de sus ocupantes habituales.