El Ajuntament de Palma ha claudicado finalmente ante los problemas que durante meses ha planteado la empresa adjudicataria y a las críticas que desde diversos sectores ha merecido el proyecto de soterramiento de las Avenidas. Así, y con más de un año de retraso, el concejal de Urbanismo anunció ayer que ya está listo el proyecto definitivo de la segunda fase del proyecto del Parc de ses Estaciones, que no incluye el soterramiento de las vías y cuyas obras comenzarán entre el 20 y el 30 de enero, una vez pasado Sant Sebastià.
Rafel Vidal enumeró hasta cuatro motivos por los que el Gobierno municipal ha renunciado a enterrar una parte de las Avenidas. Las más importantes, la menor repercusión y molestias para los ciudadanos del nuevo proyecto y la incapacidad de Dragados para garantizar la ejecución de las obras en doce meses y sin interrumpir el tráfico.
«También ha influido la salida, aún no materializada, del Govern balear del Consorcio del Parc de ses Estacions», decisión que, ahora que se ha eliminado el aspecto más polémico, «esperamos sea reconsiderada por el Ejecutivo», comentó Vidal, «como ha hecho Serveis Ferroviaris de Mallorca». Un último argumento esgrimido fue «el posible, aunque poco probable, hallazgo de restos arqueológicos durante las obras en profundidad, que habría retrasado aún más las obras», dijo.
Con el proyecto definitivo el tráfico tan sólo se interrumpirá durante dos meses y afectará a un solo sentido de la circulación. Mientras que durante el resto del tiempo, hasta los doce meses que durarán las obras, estarán abiertos los seis carriles existentes. La segunda fase del proyecto tendrá como actuación más importante la remodelación de la actual configuración de la Plaça d'Espanya, la cual se amplía hasta el pie de los edificios colindantes, desaparecen las aceras y el tráfico alrededor de la plaza.