El conseller d'Hisenda, Joan Mesquida, y el presidente de la Bolsa de Barcelona, Joan Hortalà, mantuvieron ayer una reunión en Palma para propiciar, a través de la sociedad de garantía recíproca ISBA, «la búsqueda de financiación alternativa a la puramente bancaria a través del mercado de capitales que se puede derivar del convenio ARC (Asesoramiento para la Búsqueda de Capital), formalizado por el Centro de Empresas Innovadoras y la Bolsa de Barcelona», según explicó ayer el conseller Mesquida.
La Bolsa de Barcelona actuaría de mero intermediario para propiciar, a través de la sociedad ARC, «la posibilidad de que pequeñas y medianas empresas que necesitan financiación y recursos, los obtengan al margen de la pura actividad bancaria, propiciando la entrada temporal en su accionariado de las empresas que aporten capital hasta su amortización, lo cual evitará pagar intereses». Los gestores de ISBA van a trabajar en este sentido durante los próximos meses para lograr plasmar este proyecto.
Hortalà, que visitó ayer Palma invitado por la Banca March para impartir una conferencia sobre la bolsa, indicó que las perspectivas económicas del país son positivas, «únicamente estamos supeditados a factores como el alza del dólar y el precio del combustible, lo cual está incidiendo en el consumo privado y en la evolución económica del país. Estos factores negativos pueden remitir en un plazo de tres meses, según las previsiones de los expertos, una vez se normalice el precio del petróleo».
La evolución bursátil en nuestro país, en este sentido, «no se corresponde con el saneamiento de las empresas, generándose una situación que no es la real, principalmente propiciada por la falta de confianza existente entre los inversores». Reconoció que no es el mejor momento para las empresas para salir a bolsa, de ahí el retraímento existente en el sector privado.