La empresa de seguridad privada Trablisa se vio ayer obligada, por la actitud de sus trabajadores, a suspender de forma temporal la puesta en marcha del servicio de seguridad en los filtros de pasajeros en Son Sant Joan «ante la negativa manifiesta a la realización de este servicio por parte de los trabajadores asignados», según un comunicado remitido ayer al comité de empresa.
La postura de Trablisa estuvo motivada por la negativa de los trabajadores a manejar los escáneres de control del equipaje de mano de los pasajeros en los filtros de control existente en la planta cuarta del aeropuerto, «porque no hemos recibido ninguna formación sobre la prevención de riesgos laborales en este puesto de trabajo y porque exigimos a la empresa un plus de peligrosidad y un complemento personal, que se traduciría en unas 27.000 pesetas al mes por trabajador», según explicaba ayer el presidente del comité de empresa, Arturo González.
Trablisa, que recibió la contrata de este servicio a finales del pasado mes de septiembre por parte de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) en Son Sant Joan, tenía que empezar ayer, día uno de noviembre, a hacer efectiva esta contrata, en sustitución de la Guardia Civil. Sin embargo, los trabajadores, tanto en el primer turno (06.00 horas) como en el segundo (14.00 horas) se negaron a hacerlo.
La empresa, ante estos hechos, «ha expedientado a los trabajadores, les ha retirado del servicio, así como de la tarjeta de seguridad aeroportuaria y les ha comunicado que lo sucedido constituye una falta muy grave. Sin embargo, ante la postura generalizada de todos los trabajadores se ha visto obligada a cambiar de postura y emitir el comunicado de suspensión de servicio y retirar todos los cargos contra los trabajadores».
La Guardia Civil, para evitar que hubiera dejadez de funciones en los filtros de seguridad de pasajeros, se vio obligada a seguir realizando dicho servicio en Son Sant Joan.