El president del Govern, Francesc Antich, anunció ayer su intención de solicitar una reunión urgente con el ministro de Fomento, Francisco Àlvarez Cascos, para intentar zanjar la polémica entre el Ejecutivo autonómico y el Gobierno central por la financiación de las carreteras. Esta petición de reunión fue anunciada ayer después de que el president se reuniese en el Consolat de Mar, durante más de una hora, con el portavoz del PP en el Parlament, José María González Ortea, para intentar buscar soluciones «a los problemas de Estado que padece Balears».
Antich y González Ortea, que ofrecieron una rueda de prensa conjunta en el patio del Consolat de Mar, acordaron iniciar una nueva relación para llegar a acuerdos en lo que el president califica como «temas de Estado». «Hay que hacer un esfuerzo para eliminar la crispación que hay en la política y hemos de dedicar más tiempo a realizar políticas útiles para nuestros ciudadanos», opinó Antich. El jefe del gabinete autonómico pidió la colaboración del PP en buscar soluciones al desarrollo del Régimen Especial, una ley que se aprobó en Balears con el voto en contra del PSOE, así como la financiación de las carreteras y la financiación autonómica.
Sobre la polémica que rodea la financiación de nuevos proyectos de carreteras, el portavoz del PP fue muy claro y solicitó al Govern que «presente los proyectos a Madrid porque el convenio puede cambiarse». «Hemos hablado con calma sobre el tema de las carreteras y yo le he dicho al president que hay que ir a Madrid con los proyectos concretos porque el convenio puede cambiarse», destacó. El president anunció su decisión de reunirse personalmente con Àlvarez Cascos después de que el ministro de Fomento anunciase en el Senado su intención de no costear los «proyectos inseguros» que pretende poner en marcha el Govern. Antich acudirá al Ministerio de Fomento después de que su conseller d'Obres Públiques, Josep Antoni Ferrer, se reuniese con Cascos y obtuviese la misma respuesta: Madrid no financiará carreteras inseguras.