El presidente de la Junta Insular del Partido Popular (PP) de Mallorca, Jaume Font, anunció ayer su decisión «absolutamente irrevocable» de no presentarse a la reelección en el congreso que los conservadores celebrarán el próximo sábado en la capital balear.
La pasada semana, Font había confirmado todo lo contrario, es decir, que sí postularía al cargo. «Comprendo que esta actitud resulte incomprensible para mucha gente, por ello, pido disculpas por esta conducta precipitada o poco meditada», explicó Font en un comunicado que leyó ayer ante los medios de comunicación en la sede del PP. Font aplazó hasta el próximo fin de semana la explicación sobre los motivos que le impulsan a no continuar al frente del PP mallorquín.
El presidente del PP balear, Jaume Matas «conoce mi decisión irrevocable desde el pasado viernes», dijo Font, y agregó que su intención de no presentarse, era conocida por Matas desde julio y agosto. Tras disculparse públicamente ante sus compañeros de partido, los votantes y la opinión pública, por haber anunciado la semana pasada su decisión de optar al cargo, Font aseguró que «una reflexión más serena, hecha con la cabeza fría y el corazón caliente, me han decidido a reconsiderar mi primera intención».
Font deja el cargo por motivos personales tras acudir el viernes por la tarde a una clínica de Palma, aquejado de problemas cardíacos leves. La frenética actividad política de Font y su frágil salud han sido claves para que el actual portavoz del PP en el Consell decida no presentar candidatura en el congreso insular que se celebra el próximo sábado en el Pueblo Español.
El sustituto de Font será Pere Rotger, el candidato del PP más votado en las pasadas elecciones municipales y una persona de reconocido prestigio en el seno de las filas populares. El propio Jaume Matas alargó su estancia en Palma y durante toda la mañana de ayer se dedicó a cerrar la candidatura que se votará en el congreso del sábado.