Un estudio elaborado por el economista Esteve Bardolet por encargo de la Cámara de Comercio reconoce que el subgrupo de «servicios turísticos» (hotel más transporte) ha experimentado un notable aumento de precios, tanto en el IPC de agosto (12% igual para España y Balears) como en el IPC interanual (25'1% en España y Balears). Ello implica que ese subrupo «sí sea inflacionista», según la conclusión del estudio.
«El hecho de ser el mismo porcentaje de aumento de precio en España y en Balears se debe a su precio único, para todo el territorio nacional, fijado por el mayorista. Este subgrupo sí es inflacionista y la explicación probable de ello sea por el incremento del componente 'transporte' ya que el componente 'hotel' no ha experimentado una subida de este orden». El estudio intenta explicar las razones que han aconsejado a determinados miembros del Gobierno de José María Aznar a culpar al turismo de la tendencia inflacionista de los precios. «Como es lógico "dice el estudio" el sector hotelero ha protestado porque en el epígrafe 'turismo y hotelería' del IPC hay otros elementos que son sólo parcialmente 'turismo' (restaurantes, bares cafeterías) y han contribuido más que los hoteles a la elevación de precios que se denuncian».
Según el informe, «en agosto de 2000, dado que el IPC nacional (interanual) se sitúa con el 3'6% en 1'6 puntos por encima del límite impuesto por el Banco Central Europeo para garantizar el control monetario, la subida ha sido muy preocupante y por ello la acusación al sector turístico ha tenido una justificación desde el punto de vista del Gobierno central».
Para centrar el debate, Bardolet señala que «no hay que olvidar que el IPC no mide el consumo de los ciudadanos sino la variación del 'coste de vida', según una cesta simbólica de precios de productos y servicios ofertados en España, obteniendo esta información de los listados de precios de los productores de los mismos».