A primera hora de la mañana, de ayer sábado, algunas de las madres de los alumnos de segundo curso, del colegio público de Son Espanyolet de Palma, llegaron al centro ataviadas con ropa sport y armadas con cubos de pintura y brochas.
Con la mejor intención estos padres pintaron durante toda la mañana el aula donde sus hijos han comenzado las clases. Una acción permitida por el profesorado y dirección del centro. Incluso semanas pasadas las propias profesoras pintaron algunas de las aulas. Desde el pasado año el centro ha pedido a los responsables del Ayuntamiento que se pinte el colegio y la fachada. El comienzo de este nuevo curso ha permitido a los casi 400 alumnos tener una nueva directora, cosa que es noticia ya que el edificio data desde 1934 y en toda su historia, 70 años, sólo ha tenido dos directores. Esta nueva directora es muy querida por alumnos, padres y profesorado que ven como la nueva directora esta abierta a nuevos cambios, reformas y mejoras para el centro y todos los que estudian o trabajan en él. Incluso existe mayor diálogo entre la Asociación de Padres y el colegio.
Más de cuatro horas fueron las necesarias para dejar el aula resplandeciente y con un nuevo look. Se utilizaron dos botes de pintura de cuatro kilos. Dos tonos, color blanco y color crema. La parte alta no se pudo pintar debido a que los techos son muy altos y a falta de andamios, escaleras o palos largos de rodillo no pudieron llegar más arriba.
La pintura la aportó el centro aunque la compraron los padres, así como las brochas. La jornada transcurrió con muy buen humor y recordando viejos tiempos cuando ellos, los ahora padres, eran alumnos, mirando con añoranza la infancia, aunque también reconocen que ahora los niños viven mucho mejor.