Las asociaciones integradas en la CAEB afectadas por las continuas subidas del precio de los carburantes: Federación Agrícola y Ganadera de Balears, agrupaciones de transportes de pasajeros y mercancías, ambulancias y taxis, junto con la cofradía de pescadores de Palma, amenazaron ayer con colapsar la Isla si el Gobierno central no elimina el Impuesto de Hidrocarburos y ofrece medidas compensatorias que palien su pérdida de renta.
Así lo manifestó el presidente de los empresarios, Josep Oliver, durante la presentación de la plataforma de profesionales afectados, plataforma que, a la espera de conocer y evaluar las ofertas que realice el Gobierno central, ya ha descartado adherirse a las movilizaciones convocadas para la próxima semana por Unió de Pagesos. «Actualmente nuestras organizaciones estatales están llevando a cabo negociaciones en Madrid y consideramos, a la espera de que este diálogo pueda dar sus frutos, que no es conveniente movilizarse», aseguró.
Sin embargo, según Oliver, este compás de espera no significa que se descarten las protestas, y fuentes cercanas a la plataforma aseguran que se han dado de plazo hasta el 12 de octubre. Si en esa fecha Madrid ofrece alternativas no habrá movilizaciones, en caso contrario, sacarán sus efectivos a la calle.
Por su parte, el presidente de la FAGB, Fernando Dameto, reiteró que su organización no ha sido informada por Unió de Pagesos del calendario de movilizaciones y, por lo tanto, «no existe consenso». Dameto, que expresó su confianza en que finalmente se alcance un acuerdo, aseguró que, «por responsabilidad debemos dosificar nuestras actuaciones hasta que veamos que la situación es irreversible».
En los mismo términos se manifestaron los transportistas que, a través de sus presidentes, Jaume Batle y Miquel Binimelis, exigieron la comercialización de un gasóleo profesional y vaticinaron la desaparición de algunas empresas del sector, «al dejar de ser viables».