«Jaume Matas está usando su cargo para conspirar políticamente contra el Govern», aseguró ayer el vicepresidente, Pere Sampol, tras la reunión que los miembros del Ejecutivo han mantenido estos días en Petra. La opinión de Sampol es compartida por la totalidad de los miembros del Ejecutivo, según se puso de manifiesto ayer en la rueda de prensa conjunta que ofrecieron Francesc Antich, Pere Sampol, Eberhard Grosske y Margalida Rosselló.
El presidente destacó la enorme preocupación del Govern por la actitud del Gobierno y afirmó que Balears ha pasado «del olvido a la falta de respeto; del desinterés a la agresión». Para Matas, el PP está empleando al Gobierno central para tratar de gobernar a su manera esta Comunitat y sentenció que Matas quiere gobernar en Balears «a golpe de talonario y eso es vulnerar las reglas de democráticas».
Antich aseguró que expresará el ministro estas quejas en la reunión que ambos tienen previsto mantener el próximo día 13, si bien consideró que Aznar no debería permitir a Matas actuar como lo está haciendo. Para el presidente, la negociación paralela que mantiene Matas con ayuntamientos del PP como el de Palma para la instalación de una nueva desaladora es una evidencia de esta actuación. «En un momento en que se está negociando el plan hidrológico, no es de recibo que Matas intente llegar a acuerdos con nadie que no sea el Govern».
En referencia al plan hidrológico, Pere Sampol, recordó que el texto fue aprobado por unanimidad en el Parlament «y, por muy ministro que sea, Matas no puede modificar la voluntad expresada en el Parlament».