Los miembros del Govern se reúnen desde esta tarde en Petra con el fin de dar un repaso a las iniciativas políticas que centrarán el trabajo de las diferentes conselleries a lo largo de este nuevo curso político. La reunión, que continuará mañana, ha tenido que celebrarse una vez concluido el verano, a pesar de que inicialmente estaba prevista para el mes de junio. Aquel encuentro, en el que se debían analizar las moratorias de los consells insulares, tuvo que suspenderse ya que la documentación sobre esta norma cautelar no estaba cerrada.
Un portavoz del Govern informó de que, durante este encuentro, no se adoptarán decisiones, ya que el objetivo de la reunión es marcar el plan de trabajo del Govern para los próximos meses. Las previsiones apuntan a que cada conseller expondrá al resto de sus compañeros de gabinete las prioridades de su departamento para este otoño. Se da por hecho que los consellers abordarán algunos asuntos polémicos, como la subida de pensiones o el expediente sancionador a la empresa GESA por negligencia en el apagón del pasado mes de junio.
A pesar de que el conseller d'Obres Públiques, Josep Antoni Ferrer, no estará presente en la reunión, se da por hecho que los miembros del Ejecutivo abordarán la planificación de las carreteras de las Islas, especialmente después de que el ministro de Fomento, Francisco Àlvarez Cascos, haya advertido al Govern de que corre el riesgo de perder parte de las inversiones del convenio de carreteras si no se construyen las autopistas pactadas con el Gobierno.
En la reunión se estudiará además la importante polémica que ha enfrentado el Govern, especialmente a la consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló, con el ministro de Medio Ambiente a cuenta de las inversiones en infraestructura hidráulica.