La ofrenda floral a la patrona de Palma, la Verge de la Salut, resultó todo un éxito de participación ciudadana. Un gran ambiente de fiesta reinó desde la plaza de Cort hasta las calles de Sant Miquel y Oms, por donde discurrió el alegre pasacalles, en el que intervino el grupo de gegants de la Sala.
En un tramo de la calle Sant Miquel se colocaron varias filas de sillas, que fueron ocupadas totalmente por el público. Frente al templo se ubicó el catafalco de autoridades, que ocuparon la delegada del Gobierno, Catalina Cirer, y los regidores de Cort José María Rodríguez, Carme Feliu y María José Frau. El alcalde de Palma, Joan Fageda, presidió el desfile participando detrás de la Sección Montada de la Policía Local y la Banda Municipal de Música, pasando luego a ocupar un lugar en el palco.
En el cortejo, coordinado por miembros del Grup Güell, participaron bandas de música, numerosos centros culturales, deportivos y de la tercera edad de Palma, y núcleos cercanos, cuyos miembros fueron entregando sus ramos de flores y cestos de frutas. La nota de color la aportaron las casas regionales de Valencia, Galicia, Murcia, Castilla y León, la Asociación Adarve, y las agrupaciones del Camp Redó y Rafal, estos últimos luciendo vestimenta a l'ample. También participó la Casa Catalana y la Hermandad de la Virgen del Rocío de Palma, junto a los representantes de la cofradía de La Salud del Terreno.
La delegada del Gobierno, Catalina Cirer, José María Rodríguez y el alcalde Joan Fageda ofrendaron un gran centro floral y María José Frau aportó los frutos. El alcalde cerró el acto pronunciando el pregón de la ofrenda a la patrona de Palma.