La consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló, acusó ayer al ministro del ramo, Jaume Matas, de actuar con deslealtad al no presentarle toda la documentación del Plan Hidrológico Nacional que afecta a las Islas y le exigió que incluya en los presupuesto para el año 2001 una partida de 15.552 millones de pesetas para acometer las obras hídricas que el Govern considera urgentes.
Estos proyectos, entre los que destacaron el trasvase de sa Costera y la ampliación de las desaladoras de Palma y Formentera, tendrían que ser incluidos en los presupuestos del Estado que se van a presentar en unos meses ya que, en caso contrario «las obras no estarán listas para el próximo verano».
La consellera de Medi Ambient, que señaló que el Ministerio actuó «con desprecio» hacia las comunidades que tienen las competencias en materia hidráulica, argumentó sus peticiones en el convenio que, según ella, negoció el anterior Ejecutivo y que incluía las inversiones hasta el año 2001 por valor de 10.252 millones. Estos proyectos, además del citado trasvase de sa Costera, incluía las arterias entre Consell, Palmanyola y Son Pax, las arterias de la desaladora de Eivissa y Formentera, el desvío del torrente de Manacor, entre otros.
Aparte de estas obras pendientes el Govern ha reclamado, «de forma reiterada y urgente», el pago de las ya citadas ampliaciones de las desaladoras de Palma y Formentera y de las desaladoras portátiles por un valor de 5.300 millones, que sumados a los anteriores dan la cifra de 15.552 millones.