Joan Casals Thomas, ex presidente del Fomento del Turismo de Menorca y uno de los históricos de la hotelería y política balear, analiza los últimos acontecimientos acaecidos en torno a la implantación del impuesto turístico y la actitud del Govern durante este último año, afirmando que si ha comenzado una guerra entre el sector hotelero y el Govern «el Ejecutivo no tiene posibilidad de ganarla, por lo que debe imperar la sensatez».
Casals indica que hace un año, «Menorca apoyó sin reservas la creación de la ecotasa, pero siempre a partir de una filosofía concreta, que era la de hacer en Menorca un producto turístico diferenciado del resto de las Islas, pero al final se ha concebido como un impuesto particularizado y que afecta únicamente a un subsector. Esto no es lo que se habló ni analizó en su día, de ahí que los objetivos ambiguos de la actual ecotasa no sirven para gran cosa, ya que todo ha quedado desfigurado».
Afirma que con estos vaivenes «no nos sentimos satisfechos de la actuación política del Govern. Espero que impere el seny menorquín y que la reacción hotelera no sea respondida con una defensa numantina y sin argumentos, ya que parece como si el Govern ejecutara el principio de autoridad. Tiene que haber un principio de equidad y no sólo castigar a un sector que es el que menos contamina. Y es que no es posible crear políticas sectoriales al margen de una política estructural».