La fuerte inmigración registrada en Balears en los últimos diez años y muy concretamente en la ciudad de Palma, ha hecho disminuir de forma «notable» el número de ciudadanos que conocen y usan de forma habitual la lengua catalana.
Ante esta situación de retroceso lingüístico y progresiva sustitución del catalán por el castellano, la direcció general de Política Lingüística del Govern balear, en manos de Joan Melià (PSM) convocará una reunión entre los representantes del Govern, del Ajuntament de Palma y el Consell Insular de Mallorca. El objetivo del encuentro no es otro que crear un gran plan de Normalización Lingüística entre las tres administraciones para poner freno a este retroceso en la normalización. Melià explicó que «hemos de tener en cuenta que en Palma vive el 50 por ciento de los habitantes de las Islas». El objetivo principal de este plan, que se comenzará a aplicar en el 2001 ya que la reunión está prevista para el mes de septiembre, es coordinar de una vez por todas las iniciativas que llevan a cabo las instituciones en este sentido y evitar la repetición y duplicidad de las campañas.
Aunque todavía no ha trascendido ninguna de las propuestas que se llevarán a la reunión la intención del Govern es que las campañas de normalización se centren en la formación de los inmigrantes y en normalizar los espacios de ocio. En este sentido ayer se conoció que el Govern tan sólo concede seis millones ochocientas mil pesetas al Ajuntament de Palma para que sean invertidos en concepto de Normalización Lingüística. En su momento, el departamento de Cultura de Cort transmitió a la direcció general de Política Lingüística su proyecto de normalización, presupuestado en poco más de 114 millones de pesetas.