La oposición municipal valoró ayer de diferente modo la noticia de que el Ajuntament esté dispuesto a rescindir el contrato de Dragados y Construcciones para el soterramiento de las Avenidas, pero en todos los casos los grupos recordaron haberse opuesto al proyecto desde un principio y reclamaron que éste no siga adelante.
En primer lugar, la coalición municipal de EU-Els Verds solicitó al alcalde, Joan Fageda, «que reconsidere el macroproyecto de soterramiento ante los problemas planteados por la empresa adjudicataria». «Es un buen momento para reflexionar sobre la conveniencia o no de continuar con el proyecto», opinó EU-Els Verds y recordó su posición contraria a la construcción de nuevos aparcamientos en el centro de Palma. Según el grupo, Cort «ha empezado la casa por el tejado» al proyectar una obra de estas dimensiones sin tener los resultados del estudio de movilidad. Los ciudadanos de Palma «que padecerán durante meses las obras de la Plaça d'Espanya y los cambios de circulación de muchas calles importantes de la ciudad agradecerán al alcalde que valore con objetividad las ventajas e inconvenientes antes de mantener este proyecto».
Desde UM se declaró que «casi le estamos agradecidos a Dragados por sus incumplimientos pues podría ahorra a la ciudad un proyecto absurdo que supone grandes complicaciones de tráfico y molestias para los ciudadanos», afirmó Ferran Trujillo. Los socialistas de Palma fueron más allá al aseverar que «lo que pretende el Consistorio es cargar el muerto a Dragados y tener así una excusa para rescindir el contrato, porque se ha dado cuenta de su error al aprobar el proyecto».