La coalición municipal de EU-Els Verds en Cort defendió ayer que la subida de las tarifa del agua decidida por EMAYA «no está justificada» y que «no se puede culpar a otras instituciones de lo que sólo es el resultado de una pésima gestión». En estos términos se expresó el edil Jordi López tras la reunión del consejo de administración de la empresa municipal, en la que se aprobó el incremento de la cuota fija de la factura del agua.
Aseveró que esta subida supondrá para EMAYA unos 600 millones de beneficios adicionales. Explicó que, según los datos aportados por la empresa, el convenio firmado por Palma con el Govern para la compra de las desaladoras móviles le obliga al pago de 564 millones, como parte fija, y a la compra de 14'5 hectómetros de agua desalada a un precio de 89'9 pesetas el metro cúbico. «Pues bien, con el incremento de la cuota fija de las facturas la empresa recaudará por este concepto 1.810 millones de pesetas anuales, 966 millones más de lo previsto en 1999, cantidad con la que puede satisfacer los 564 millones del convenio y todavía le sobran 402 millones».
Además, los 14'5 hectómetros de agua desalada, a 90 pesetas el metro cúbico, suponen un gasto de 1.303 millones, «pero al venderla a 105 pesetas recaudará 1.527 millones, es decir que gana 224 millones en esta operación», concluyó. Para el edil, estas cifras «ponen de manifiesto que la empresa defiende un máximo de desalación y un mínimo ahorro, frente a una concepción ecologista que defiende justamente lo contrario». Recalcó que «si EMAYA quiere subir las tarifas, que se busque un excusa mejor y no culpe a otras instituciones, como ha hecho en el anuncio que publicó en la prensa, por no haber ampliado la desaladora de la Bahía de Palma en diciembre del pasado año».