El viernes hubo noche de elecciones en Pollença. Más de mil personas se acercaron al Ajuntament a partir de las nueve y media para elegir a los jóvenes que representarán los diferentes cargos del simulacro de Moros y Cristianos el próximo mes de agosto.
Rafel Oliver será el valiente Joan Mas que se enfrentará al corsario Dragut, interpretado en esta ocasión por Jaume Colomar. Pollença se ha volcado este año especialmente con las elecciones. Cerca de 1.400 personas pasaron por las urnas instaladas en el Ajuntament. Tal y como marca la tradición, a las nueve y media en punto de la noche se abrieron las puertas de la Casa Consistorial para dar paso a los votantes, que recogieron ordenadamente sus papeletas. Una vez en el interior se desplazaron hacia el patio donde rellenaron los boletos. Aunque las normas establecen el cierre de las puertas del Ajuntament a las diez de la noche, la avalancha de gente impidió cumplir con los plazos. Pasaban de las 22'30 horas cuando se dio la orden de cierre y las 1.392 personas que esperaban aglomeradas en el patio pudieron introducir ordenadamente sus papeletas en las urnas.
A pesar de la masificación el recuento fue relativamente rápido. Poco después de la media noche se oían los primeros gritos de euforia. Eran de la cuadrilla del futuro Dragut, Jaume Colomar, que aventajaba mucho en número de votos a sus oponentes. Joan Josep Xumet hará las veces de lugarteniente y Bartomeu Ros será el abanderado. Rafel Oliver será Joan Mas por aplastante mayoría. Antoni Provendal, Miquel Seguí, Guillermo Vives y Joan Buades representarán al Ajuntament.