Nati Expósito, la ex del ex torero Jesulín de Ubrique, contrajo matrimonio ayer en el Castell de Bellver con Jurgen Lakal, un belga del que se enamoró hace dos veranos en un concierto que Alejandro Sanz dio en Palma. El parecido con el cantante fue el que motivó en su día que Nati Expósito se fijara en el flamenco.
A las 19.30 en punto hacía acto de presencia la pareja de novios en la entrada del castillo. Llegaba la hora del matrimonio tras dos años de convivencia juntos. Nati Expósito confesó sentirse muy nerviosa, pero insistió en el hecho de que era el día más feliz de su vida. Su media naranja no dejó de sonreir a los que allí se encontraban: prensa, curiosos e invitados. La ceremonia de ayer no va a ser la única. Los novios han decidido celebrar en agosto otra en la ciudad belga de Brujas. La ausencia de amigos del novio ha provocado que tomen esta decisión, para que así puedan disfrutar de una boda todos sus allegados.
El vestido de Nati Expósito lo diseñó Julià Alemany. La novia se decantó por este diseñador porque le ofreció hace unos meses que formara parte de un pase de modelos que se celebró con motivo de la lucha contra el cáncer. El traje era blanco, de línea romántica, y el velo Nati no se lo quiso levantar hasta que el teniente alcalde Joan Bauzà dio por concluido el acto del casamiento. La anécdota la protagonizó Jurgen Lakal, al que en plena ceremonia le sonó el móvil. Está visto que la era de la telefonía no respeta ni las bodas. El viaje de novios lo harán por el centro de Europa.