El Govern, a través del Ibavi, quiere ahorrarse entre un 5 y un 10 por ciento en la construcción de viviendas de protección de oficial mediante la convocatoria de concursos para adquirir pavimentos, puertas y cocinas. Este sistema, que ya utilizan las grandes empresas de construcción, permitiría un ahorro en el precio final de las viviendas, cuya cotización se ha disparado en Balears. A pesar de los problemas que plantea el propio mercado inmobiliario de las Islas para construir este tipo de viviendas, el Ibavi anunció que están en marcha la edificación de unos 2.500 pisos.
El incremento de los costes del material de la construcción también ha obligado a cambiar la política del Govern en relación a las viviendas de régimen especial. Este tipo de inmuebles, destinado a las familias con menos poder adquisitivo, sólo se proporcionarán en régimen de alquiler ya que su venda no cubre ni los gastos de construcción. Las viviendas deben venderse a 76.000 pesetas el metro cuadrado cuando su coste de construcción alcanza las 80.000 pesetas. «Estas pérdidas se resolverán a través del alquiler de las viviendas porque vender no sale rentable», señaló Teresa García.
Tanto la gerente del Ibavi como el conseller d'Obres Públiques, Josep Antoni Ferrer, destacaron el importante esfuerzo que está realizando este departamento para poner en marcha viviendas de protección oficial. Durante los dos próximos años se tienen previsto construir unos 2.500 inmuebles, muy lejos de las 396 viviendas que impulsó el anterior Govern con cuatro años de gestión. No obstante, Ferrer advirtió que sin la colaboración de Cort «no habrá más suelo para construir viviendas sociales en Balears dentro de dos años».