El presidente de la Asociación de Autónomos del Autotaxi de PIMEM, Gabriel Moragues, se mostró ayer satisfecho del acuerdo alcanzado con el conseller d'Obres Públiques, si bien advirtió que «vamos a seguir manteniendo la presión en el aeropuerto en tanto veamos resultados». Para ello, la Policía Local de Palma y los inspectores de la Conselleria colaborarán para evitar los posibles abusos que puedan cometer algunos taxistas de la Part Forana.
En efecto, Moragues recordó que «estábamos dispuestos a llegar hasta el final por defender nuestro derecho a trabajar en exclusiva en el aeropuerto» y que si se han desconvocado los paros es porque el conseller se ha comprometido a reclamar a Madrid la derogación o modificación del decreto. Esta petición deberá realizarse en el seno de la reunión que periódicamente celebran los directores generales de Transportes de todas las comunidades, que ayer mismo tenía lugar en Canarias. Por eso, el presidente de PIMEM lamentó que «se ha perdido esta oportunidad y habrá que esperar a la próxima reunión». Pero, en tanto, añadió «Ferrer está decidido a estudiar las fórmulas jurídicas para compensar a los taxistas de Palma la pérdida de la exclusividad, estudiando la reciprocidad en toda la Isla, a partir de servicios precontratados, y la subida de las tarifas interurbanas».
Moragues reconoció ayer que la labor realizada por el alcalde en Madrid y la del conseller en Palma «parecen confluir, por fin, en un mismo objetivo». De hecho, dijo haberles pedido a ambos «que se olviden de los colores políticos y pongan todo lo que está de su parte para resolver el conflicto». Más aún, la PIMEM remitió ayer un comunicado de agradecimiento al primer edil de Ciutat y al concejal de Governació, José Manuel Sierra, por «las gestiones realizadas y el interés constante que ha demostrado por los problemas del sector».