La playa de Cala Estància presentaba ayer un aspecto lamentable, con la presencia de una enorme cantidad de suciedad flotante que la han convertido, por el momento, en no apta para el baño. Las denuncias de los residentes de la zona, que se multiplicaban a medida que avanzaba el día, dieron la señal de alarma. A media tarde, desde la Conselleria de Sanitat se explicó que la razón era el vertido de aguas residuales en esta playa por culpa de la rotura de una tubería de la red de alcantarillado, lo que provocó que toda la porquería fuese a parar al mar.
La red de alcantarillado es competencia de la Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillados (EMAYA), y por eso durante la tarde desde la Conselleria se trataba de localizar a sus responsables. Los técnicos de Sanidad Ambiental recogieron una serie de muestras de estas aguas que ahora serán analizadas. No obstante, aún antes de cualquier análisis, ya se avanzó que las aguas están muy posiblemente contaminadas. Los vecinos culpaban ayer a la empresa municipal del accidente y exigían a sus responsables la limpieza de las aguas lo más rápidamente posible.
Durante los próximos días se trabajará en la limpieza de las aguas y en la reparación de la red de aguas residuales, por lo que nos será aconsejable el baño en estas aguas hasta que desde la Conselleria o desde el Consistorio palmesano se confirme que los vertidos han sido eliminados y la normalidad ha vuelto a la playa de Cala Estància.