Tras los incidentes ocurridos el pasado miércoles en el aeropuerto de Son Sant Joan entre taxistas de Palma y de la Part Forana, una representación de estos últimos se reunió ayer para estudiar posibles acciones para defender lo que consideran su derecho a cargar pasajeros "previa contratación" en el aeropuerto, derecho al que se oponen los taxistas de Palma.
Martí Llull, con el taxi número 26 de Manacor, fue uno de los implicados en la tensa situación vivida anteayer en el aeropuerto: «Fui a buscar a una clienta al aeropuerto con el fax que previamente ella me había enviado. Al llegar, los taxistas de Palma no me dejaron cargar de ninguna manera y me amenazaron, me insultaron y escupieron al coche. La policía estaba allí, pero no intervino, no nos ayudó nada».
El abogado Andrés Buades, defensor de los taxistas de la Part Forana, resumió cómo se encuentra el conflicto en la actualidad: «Hay un decreto a nivel nacional que permite a los taxistas que represento cargar en el aeropuerto con una contratación previa. Y resulta que unos taxistas que cuentan con esta autorización, que reciben el visto bueno de la Policía Local ya que ese contrato es correcto, ven cómo ciento cincuenta taxistas no les dejan cargar, la policía que está allí no dice nada, y se tienen que ir de vacío».