La Asociación de Agencias de Viajes de Balears (Aviba) mostró ayer su total oposición al conseller de Turisme, Celestí Alomar, para que se aplique un impuesto sobre alojamientos turísticos. Su presidente, Eduardo Zamorano, declaraba tras mantener el encuentro con el conseller que la creación de la ecotasa «es negativa tal y como está contemplada, ya que es un error castigar al turista controlado que llega a las Islas mediante un paquete turístico. Este hecho provocará posiblemente un aumento de los precios hoteleros».
Zamorano estuvo acompañado por la vicepresidenta de Aviba, María Antonia Gual; el gerente de la entidad, Víctor Fernández, y el secretario, Jaume Gual. Durante las dos horas que duró la reunión, que tuvo lugar en el Consolat de la Mar, ambas partes expusieron sus motivos.
El conseller Alomar simplemente se limitó a indicar que son dos posturas contrapuestas, de ahí que Zamorano comentara nada más salir: «Cada uno ha tirado por un camino y parece que no va a haber encuentro en ningún momento. La postura de Aviba sigue siendo la misma que antes de la reunión, ya que seguimos estando de acuerdo con el fondo de rehabilitación de espacios medioambientales, pero no con el impuesto turístico como instrumento para conseguir los recursos suficientes para dotarlo. El fondo de rehabilitación es necesario, porque hace falta hacer las mayores inversiones posibles en el tema de preservar el medioambiente».