Los abogados de las empresas servidoras de Internet, Bitel y Atlas, comparecieron ayer ante los funcionarios judiciales del Juzgado de Primera Instancia número 9 de Palma en la vista preliminar a la demanda que Atlas interpondrá por una presunta «competencia desleal». Bitel, la empresa semi-pública propiedad del Govern (46% de las acciones), Telefónica (44%) y Sa Nostra (10%), entregó a los funcionarios una autorización para operar expedida el pasado 18 de mayo. Eso confirma, según la interpretación de los letrados de Atlas, que operó en el sector sin licencia desde 1998.
El abogado de Atlas, Francesc Gilet, confirmó que iban a investigar el procedimiento que siguió el Mercado Nacional de las Telecomunicaciones para otorgar la licencia a Bitel, ya que ésta se concedió «con una celeridad inusitada». Bitel, representada por el abogado Lorenzo Ros, se limitó a presentar los documentos requeridos en el juzgado sin entrar en más consideraciones. Atlas, en estos momentos, estudia la demanda que interpondrá, probablemente el lunes, por competencia desleal contra Bitel al considerar que perjudicó su actividad al operar en el sector sin la pertinente autorización.
Un portavoz de Atlas dijo que estaban preparando pruebas para sustentar la demanda por la vía civil. «El tema no es trivial. Operar sin autorización es una falta muy grave. En Bitel se hicieron las cosas muy mal en muchos aspectos. Desde el correo electrónico hasta el préstamo a esa empresa (Equiof), hasta la competencia desleal. Es posible que alguien acabe denunciando más cosas. Bitel ha desvirtuado el mercado y ha jugado con otras normas», explicó.