La Comisión Europea no se opondrá a la implantación de un impuesto turístico medioambiental («ecotasa») en Baleares si este no es discriminatorio y se aplica a todos los ciudadanos, según informaron a fuentes comunitarias.
Además, el Ejecutivo comunitario «no tendría por qué oponerse» a la creación de un impuesto turístico medioambiental («ecotasa») en Baleares si éste es recaudado por los aeropuertos de las islas y si se aplica por igual a todas las compañías aéreas.
En concreto, estas fuentes explicaron que los aeropuertos de los Quince tienen competencias en materia medioambiental, por lo que estarán capacitados para recaudar un impuesto de este tipo y la Comisión Europea tendrá que respetar el principio de «subsidiariedad».
Por otro lado, el Ejecutivo comunitario tampoco plantearía objeciones si los aeropuertos aplican el impuesto a todas las compañías aéreas que transportes pasajeros a las islas, puesto que no obstaculizaría la libre competencia. No obstante, estas fuentes advirtieron de que el aeropuerto que aplique este impuesto perderá competitividad frente a otros.
De hecho, el Govern ha descartado la posibilidad de aplicar una ecotasa en los aeropuertos para evitar que el impuesto sea pagado por todos los ciudadanos. El Ejecutivo no hubiese podido diferenciar entre alemanes, británicos y mallorquines, y todos se hubieran visto obligados a pagar el impuesto. Este problema, y la falta de colaboración de Aeropuertos Nacionales, ha obligado al Govern a plantear el cobro de la ecotasa en los hoteles, con la oposición frontal del sector turístico.
Precisamente, el Govern hará distintas consultas durante los próximos días para conocer la opinión de las instituciones en relación al proyecto del Govern. El presidente del Ejecutivo, Francesc Antich, se reunirá esta mañana con la presidenta del Consell Insular de Mallorca, Maria Antònia Munar, para presentarle el último borrador de ecotasa. Munar no es partidaria de poner en marcha el impuesto.