La 'Diada' del próximo día 20 de mayo se articula bajo un lema muy conciso: «Junts per la llengua». Hace un año, poco antes de las elecciones que llevaron al Pacte de Progrés al poder, la máxima era «Per uns governants que defensin la llengua». Desde la organización de este evento, que lucha por la «supervivencia» y difusión de la lengua propia de Balears, el enfoque ha cambiado.
Antoni Mir, responsable de la Obra Cultural Balear "principal impulsor de la jornada", cree que se trata de una nueva situación en la que es preciso que el Govern «pierda el miedo y se lance hacia políticas efectivas que garanticen una mayor presencia del catalán, una lengua en franca regresión. Y deben ser ellos mismos quienes den ejemplo, normalizando la lengua en las conselleries y la Administración en general, una tarea que sólo se ha hecho parcialmente. Deben ser los primeros. Reclamamos, pues, acciones más eficaces y contundentes, más liderazgo y acciones concretas».
Mir recordó la presencia de los dirigentes políticos del Pacte de Progrés (Antich, Sampol, Grosske y Munar) en la anterior «Diada» y el hecho de que el programa de gobierno actual recoge las reivindicaciones efectuadas aquel día.
El ahora director general de Política Lingüística del Govern balear, Joan Melià, también estuvo allí. Ayer aseguró que «cuando ejerces de dinamizador cultural se ven las cosas de una forma más simple que cuando estás dentro del área. Yo quiero que el proceso de normalización se acelere. Pero también he podido constatar que la administración tiene una dinámica que a veces ralentiza la puesta en marcha de ciertos procesos. Por otra parte, desde aquí tengo una visión más completa de la situación real de nuestra lengua. Ahora bien, para avanzar se necesita la colaboración y la mentalización de la sociedad civil. Los habitantes de la Isla tienen un papel esencial».
Desde la Obra Cultural Balear, coordinadora de diferentes colectivos en defensa del catalán, se cree precisamente que «junts» significa también una mayor implicación de la sociedad, sin olvidar el Govern. «El Ejecutivo balear ha hecho algunas cosas, como un convenio con la Generalitat de Catalunya para la creación del Institut Ramon Llull para la promoción de nuestra cultura y lengua. Pedimos, sin embargo, más implicación. Ello no significa que se normalice tan sólo la Conselleria de Cultura, sino que sea un proceso transversal que afecta a todas y cada una ellas».