El borrador de medidas cautelares para frenar la construcción en suelo urbano no satisface a los responsables de Urbanisme del Consell. La presidenta de la institución insular, Maria Antònia Munar, pidió ayer al Govern cautela y aseguró que determinados temas «deben hacerse de forma más sosegada».
Por su parte, el president de la Comissió Insular d'Urbanisme, Rafel de Lacy, recordó al Govern balear que se comprometió a consensuar estas medidas cautelares con las instituciones insulares. El borrador sobre el que trabaja el Govern apuesta por decretar una suspensión de licencias urbanísticas en las zonas incluidas en el POOT para aquellos suelos urbanos o urbanizables que no tengan la consideración de solar. Lacy precisó que lo importante no son las normas cautelares en sí, ya que se trata de un simple instrumento transitorio. Para Lacy, las medidas cautelares sólo serán buenas si la norma de ordenación del territorio que se aprueba después "ya sea la modificación de las DOT, la ley del suelo o el plan territorial de Mallorca" lo es. Para Lacy, lo importante es que el Govern defina de una vez por todas su modelo de territorio en colaboración con los consells.
A los problemas que han surgido en Mallorca con las reticencias del Consell a dar su apoyo a las normas cautelares se suman los problemas de aplicación de esta norma en Menorca, donde en su momento no se redactó el POOT. El Govern está estudiando cómo aplicar esta moratoria de licencias en Menorca sin la existencia del POOT. Por lo que se refiere al contenido de los normas, el vicepresidente de la Asociación de Promotores-Constructores de Balears, Gabriel Oliver, advirtió ayer de que cualquier medida que recorte el suelo urbano disponible provocará de inmediato una subida del precio de la vivienda. Los promotores y constructores de las Islas confían en que el Govern les consulte cualquier iniciativa antes de tomar una decisión.