Los empresas lácteas de Mallorca están realizando los productos con menos crecimiento y margen de beneficios del mercado, es decir, están centrado su producción en la leche fresca y liquida cuando la demanda está disminuyendo considerablemente. Esta es una de las conclusiones a la que llega el estudio que, sobre el sector, ha encargado la Conselleria d'Agricultura a una empresa independiente, estudio que será presentado al sector en los próximo días.
Pero lo más llamativo de este trabajo, que ha necesitado varios meses para realizarse, es que los expertos recomiendan, en vista de la situación actual del mercado, que los productores se asocien y utilicen las mismas instalaciones con objeto de abaratar costes. En este sentido el estudio apunta la necesidad de que las centrales que operan en la Isla se pongan de acuerdo para recoger, de forma conjunta, la leche cada día, que sea tratada en infraestructuras comunes y que, igualmente, se realice una distribución conjunta.
En este sentido se dirige la recomendación de que, aunque haya infraestructuras (personal, reparto y gestión administrativas) y una marca común, cada una de las empresas se especialice en un producto elaborado concreto y que mantenga su propia identidad. Hoy en día la central láctea Agama y las cuatro empresas queseras que trabajan en la Isla tienen que hacer frente a una crisis en el sector motivada, por una parte, por la falta de renta de los ganaderos y, «por la multiplicidad de recursos, por la imagen deficiente y, por último, por el poco volumen y baja frecuencia en la entrega», asegura el estudio.