La procesión del Jueves Santo, más conocida como del Sant Crist, recorrió durante cuatro horas las calles de Inca. Tres mil personas, entre cofrades y portadores de los pasos, recorrieron el trayecto que enlaza las principales iglesias del municipio. El paso de la imagen del Sant Crist, que preside la procesión, es esperado por el pueblo, pero sin duda, y desde hace varios años, desde que la asociación de cofradías de Semana Santa decidió alargar el itinerario, uno de los momentos más solemnes es cuando el Sant Crist se dispone a cruzar el puente del tren.
Un solo de trompeta, interpretando la canción del silencio, es la antesala de la difícil maniobra que deben ejecutar los portadores para que la imagen pueda cruzar el puente. Los portadores deben inclinarse ya que el enorme y bello paso tiene la altura casi justa que permite que la procesión del Jueves Santo pueda llegar a la iglesia del Cristo Rey.