El colegio La Salle ha celebrado estos días su semana cultural bajo el epígrafe de «Els invents del mil·lenni». Los alumnos de educación infantil y de primaria han realizado diversas actividades "talleres, carteles, cine" que culminaron ayer con una «mostra-exposició-desfilada» en la que se dio a conocer el trabajo que los más jóvenes han llevado a cabo en estas últimas jornadas. ¿Cuáles han sido, en opinión de los más pequeños, los inventos del milenio? Los alumnos de educación infantil, sin duda futuros grandes aventureros, eligieron, entre otros, el tren, los coches, los aviones, los cohetes y los submarinos. Los del primer ciclo de primaria parecen ser más prácticos, y seleccionaron, por ejemplo, la lavadora, la máquina fotográfica, la nevera o los tejanos. Los del segundo ciclo se inclinaron por la ciencia: la calculadora, la brújula, el ordenador, el robot, el microscopio, el autogiro. Entre los del tercer ciclo seguro que hay futuros grandes médicos y algún que otro hipocondríaco: penicilina, aspirina, vitaminas y vacunas fueron algunas de sus elecciones.
«Creamos un comité con una persona representativa de cada ciclo. Pensamos que dedicar la semana cultural a algún tema relacionado con el cambio de milenio podía estar bien. Cada clase ha seleccionado un invento. También han colaborado los padres», afirmó Margarita Homar, coordinadora de las actividades.
En el desfile participaron, además de la banda de la cofradía La Salle, cada clase con el invento elegido, el aula de Tecnología de secundaria y aportaciones de algunos padres de alumnos. En el patio pudo verse una exposición de coches de diferentes épocas y un circuito con un tren a escala al que podían subirse los más pequeños. Roberto Rueda, representante del Club Ferroviario Vaporista de Mallorca, organizador de este mini tour ferroviario, afirmó: «El tren está totalmente construido por nosotros. Este trabajo sólo lo hacemos por afición. De momento sólo disponemos de un circuito portátil. Nos dedicamos a hacer exhibiciones en colegios, en fiestas, para promocionarnos y mantener el club en marcha. Más adelante nuestra ilusión sería que alguna entidad pública nos cediera algún terreno para montar un circuito permanente como los que hay en la península».