Desde el pasado 30 de marzo, Miquel Sastre, de 39 años, es el presidente de la «Asociación de empresas de peluquería de Balears», asociación que cuenta con unos trescientos cincuenta afiliados "tanto hombres como mujeres". Sastre viajará este mismo mes a Eivissa y Menorca para una primera toma de contacto.
«Aparte de la nuestra, en la actualidad hay dos asociaciones más, y me gustaría tender una mano para conseguir un diálogo con las mismas, porque todos estamos luchando por los mismos intereses profesionales dentro del mismo sector», señaló Sastre.
Las perspectivas para esta profesión parecen ser buenas: «En estos últimos cinco años ha aumentado el número de peluquerías. En cuanto al tipo de establecimiento, la tendencia es hacia las peluquerías unisex». «Las academias de peluquería son necesarias porque son parte de la formación de un profesional», indicó Sastre, añadiendo: «Nuestra asociación tiene una serie de proyectos en marcha que van relacionados en cierta manera con la formación profesional y el reciclaje de la misma, para que los profesionales podamos estar mejor preparados y podamos dignificar más nuestra profesión».
Clientes y peluqueros han ido adaptándose a los nuevos tiempos: «Hoy, el ritmo de vida que se lleva hace que la persona que va a la peluquería no tenga casi ni tiempo para hablar de su pelo». En cuanto a los profesionales, afirmó Sastre: «Hemos evolucionado muy positivamente. Pienso que nuestra profesión es de cada día más selectiva y el profesional quiere estar más preparado. De hecho, podemos afirmar que hoy en día el peluquero está preparado para tratar cualquier enfermedad "leve" a nivel de cuero cabelludo o de cabello».