Las obras de remodelación del Passeig Mallorca avanzan tanto en las aceras a uno y otro lado de sa Riera como en el interior del cauce. Este último trabajo es, precisamente, el que más llama la atención de los viandantes desde hace unos días. Las obras forman parte del proyecto global de reforma de toda la vía, pero cuentan con un presupuesto propio de 56 millones y están siendo ejecutadas por EMAYA.
El plan consiste en dotar a sa Riera de un conjunto de presas y represas que permitan que el agua fluya por el cauce en todo momento, aunque se centra en el tramo comprendido entre la Avenida de Portugal y la desembocadura del torrente. En concreto, el proyecto contempla la construcción de tres pequeñas presas, las cuales tendrán una altura variable, de algo más de un metro, y aprovecharán el desnivel que ya existe en el suelo del cauce. El agua correrá hasta topar con la primera de estas presas, que la retendrá permitiendo la primera película de agua constante en el torrente hasta que su volumen le permita saltar el obstáculo y caer en el segundo tramo donde ocurrirá lo mismo.
Por el mismo principio cuando el agua rebase la segunda presa se depositará en el tramo final del torrente. En ese momento, un sistema de bombas impulsoras y tuberías, que recogerán el agua en el extremo del cauce más cercano al mar, permitirá mantener el agua en los diferentes compartimentos, independientemente del caudal que en cada momento discurra.