El registrador mercantil de Balears, Joan Vidal, confirmó a este diario la tendencia seguida por el empresariado de Balears, que calificó de «curiosa». «El dato es muy curioso y sorprendente», explicó. «Balears ocupa el primer lugar en cuanto a autonomías en el aspecto decreciente de constitución de sociedades. Cada vez se constituyen menos sociedades con relación a años anteriores. El grado de decrecimiento que ha sufrido Balears es el máximo comparado con otras comunidades autónomas», precisó. La razón para explicar ese fenómeno, según Vidal, es que el empresario de las Islas prefiere invertir fuera, sobre todo en el sector turístico. «Es curioso " insistió" pero el empresario constituye las sociedades fuera del Estado, quizás por el menor coste de mano de obra, y de la autonomía, por razones fiscales». Todavía hay unas 18.000 sociedades «vivas» en Balears (13.00 limitadas y 5.000 las anónimas), cifra que coloca a las Islas como una de las autonomías con más sociedades por número de habitantes.
«El problema es que estas sociedades son instrumentales», explicó Vidal. «Sirven, por ejemplo, a un albañil para constituir una sociedad porque fiscalmente tiene un trato preferente. No es que ello responda a una acumulación de capital. Esto es falso», indicó.
La estadística oficial que maneja el Colegio de Registradores Mercantiles y de la Propiedad revela que el número de 18.000 sociedades creadas en Balears empieza a decrecer. «Me asombran bastante los informes oficiales, que dicen lo contrario, porque éstos no coinciden con los del Registro Mercantil», dijo Joan Vidal. En Balears, dónde sólo se registraron seis quiebras en 1999 y una suspensión de pagos, hay muchas sociedades «de estudios», dijo el registrador. «Por ejemplo, se están creando sociedades de abogados que se unen para trabajar en un tema determinado».