La Asociación Hotelera de la Platja de Palma manifestó ayer su preocupación al alcalde de Llucmajor, Lluc Tomás, porque este verano queden solventados los problemas de vertidos al mar y desaparezca «puntos negros», así como que no haya problemas de falta de agua potable, preocupación que su presidente, Miquel Vidal, hizo extensiva al Ajuntament de Palma, en la Jornada de Calidad Hotelera que tuvo lugar en su sede. El alcalde de Llucmajor, presente en la misma, anunció que la puesta en marcha de una nueva depuradora para antes del verano, que supondrá una inversión de 1.200 millones, «evitará estos problemas y permitirá, además, al realizarse una depuración terciaria, el riego a medio plazo en las zonas verdes de la zona».
La patronal hotelera se muestra preocupada por el informe de agua de baño de mar dado a conocer por el Ministerio de Sanidad, «confíamos y exigimos que los problemas de agua queden solucionados al cien por cien».
El vicepresidente de la patronal hotelera, Jordi Cabrer, dió a conocer, por su parte, que hay ocho establecimientos de esta zona que obtendrán este año el sello «Q» de Calidad, de los 43 que participan en esta iniciativa impulsada por el Instituto de Calidad Hotelera, «si logramos implantar una cultura de calidad en nuestros establecimientos turísticos e invertimos en la formación de nuestros recursos humanos, nos garantizaremos la participación en el mercado durante muchos años».