La asamblea general de la Asociación de Promotores-Constructores de Balears acordó ayer por unanimidad mostrar su total rechazo a la propuesta del Govern de limitar el crecimiento en suelo urbano, «ello propiciará que el suelo urbanizable existente dispare su cotización, lo cual provocará, como mínimo, un aumento del precio de la vivienda en las Balears en torno a un 20 por ciento. Así, se lo hemos hecho saber al conseller d'Obres Públiques, Josep Antoni Ferrer, así como nuestra preocupación por la falta de seguridad jurídica en la que nos encontramos inmersos», señalaba el presidente de esta patronal, Juan Matemalas, en el hotel Bellver de Palma.
Matemalas señala que con estos cambios de política urbanística habidos en los últimos años, «el suelo urbanizable es cada vez más escaso, se endurece la normativa y ya teníamos un marco de actuación con las Directrices de Ordenación Territorial (DOT), que ahora quieren ser variadas de manera restrictiva. Todos estos cambios normativos han ido encareciendo el precio de suelo urbanizable en las Islas, por lo que creo que tal y como se pondrá el precio de la vivienda serán muy pocos los que puedan comprarla a los precios que se va a poner. Esta estrategia, en nuestra opinión, no beneficia a nadie y ofrece una imagen de inseguridad que ralentizará cualquier tipo de inversión inmobiliaria en Balears».
Matemalas añade que han mantenido contactos con Francesc Antich, María Antonia Munar y el conseller Ferrer previos a la decisión del Govern de frenar el crecimiento del suelo urbano, «se comprometió el Govern a que antes de que se legislara cualquier tipo de cambio se recabaría nuestra opinión. Pensamos que con estas estrategias que conocemos a través de los medios de comunicación no se llega a ningún lado y estamos muy preocupados por ello».