El PSM anunció ayer su apoyo al proyecto de Els Verds para garantizar el suministro de agua de cara al próximo verano en una reunión mantenida por ambos partidos tras la crisis desatada en el seno del Govern entre Margalida Rosselló y el president Antich. «Els Verds nos ha traido su proyecto que consiste en aprovechar los recursos de las potabilizadoras y la desaladora, y desde el PSM creemos que la propuesta es factible y la situación está controlada», manifestó a este periódico Joan Antoni Salas, secretario de organización del PSM, después del encuentro entre ambos partidos. Después de reunirse con el PSM, Els Verds concretaron un encuentro con Esquera Unida.
Entre otros documentos, Els Verds presentó al PSM el acuerdo programático de gobierno para Balears, que en uno de sus puntos plantea que «las desaladoras se considerarán como la opción final una vez consideradas todas las posibilidades de ahorro y de reutilización». Asimismo, la formación ecologista quiere que se cumpla el acuerdo para «establecer una política de tarifas más unitaria y que desincentive los consumos abusivos y los usos no prioritarios del agua, así como el control efectivo de los precios del agua en alta y revisión del canon del agua».
Entre los documentos que presentó ayer Els Verds al PSM se incluía un informe de Arturo Cadenas en el que se hacen varias propuestas para garantizar el consumo de agua para este verano, aunque no todas son asumidas por la formación ecologista. Entre otras iniciativas, Els Verds defienden la solución de EMAYA de optimizar la planta posibilizadora de Lloseta, que supone un caudal diario entre 5.000 y 6.000 metros cúbicos al día. Asimismo, la formación ecologista también se muestra a favor de optimizar la planta potabilizadora de Son Tugores para absorber «en la medida que sea posible los consumos punta que puedan producirse durante los meses de verano».