El Consell de Govern aprobó ayer con carácter de urgencia un decreto que faculta a la Conselleria en Medi Ambient a autorizar provisionalmente el vertido de escombros «en las canteras que lo soliciten, en aquellas que determine la propia Conselleria, así como en los vertederos que fije la Conselleria».
Margalida Rosselló, titular de Medi Ambient, reconoció ayer que de momento la Conselleria no ha encontrado un lugar dónde depositar los escombros. Indicó que se barajan tres sitios, entre ellos Can Set, pero la apertura de esta cantera cuenta con la oposición del Ajuntament de Llucmajor. «En un plazo de dos días esta cuestión quedará resuelta de forma provisional», indicó Rosselló. «La situación es grave porque de hecho todas las canteras incumplen la reglamentación».
Mientras tanto, los transportistas decidieron ayer desplazar sus camiones de Medi Ambient, en las Avenidas, y plantarse en el Consolat de la Mar. La Policía Local cerró el Paseo Sagrera al tráfico y puso multas a los más de cincuenta camiones que estacionaron en la zona hasta entrada la tarde para exigir un lugar donde verter los escombros.