Los máximos dirigentes de las patronales Afedeco y PIME-Balears, Pau Bellinfante y Joan Fuster, respectivamente, acusaron al Ajuntament de Palma de actuar con «extrema ligereza» al plantear un aumento del precio de la ORA. «Esa es una decisión que clama al cielo por su inoportunidad», dijo Bellinfante. «Los comerciantes nos oponemos de forma rotunda a esa medida porque significa la muerte de muchos negocios. Lo que Cort debe hacer es potenciar la visita al centro de los usuarios a través de la mejora del sistema de aparcamientos, y no penalizarles con subidas de las tarifas», precisó.
Según Bellinfante, «si la decisión de subir las tarifas de la ORA en el centro de Palma se acompaña con el aumento de los precios de los aparcamientos, sería desastroso para los propietarios de los comercios». Joan Fuster también criticó con dureza al equipo de Gobierno de Cort por plantear la subida de la ORA. «Esa medida sería muy perjudicial para el comercio, porque supondría una reducción considerable de la afluencia de público a los establecimientos. Desde PIME-Balears estamos totalmente en contra de cualquier incremento de las tasas en Ciutat», precisó. Otra decisión municipal que también ha soliviantado a los comerciantes afectados ha sido la entrada en vigor, el día 1, de las Vías de Atención Preferentes (VAP). Las personas que disponen de un comercio en alguna de las calles implicadas se quejan de que esta medida ya ha comenzado a afectar a la buena marcha del mismo, pues si bien favorece a los repartidores o al tráfico en general, a ellos les afecta desde el momento en que muchos clientes potenciales pasan de largo al no poder parar ni unos minutos y tampoco encontrar aparcamiento.
Mientras, los socialistas de Palma reclamaron ayer la necesidad de que se establezca un horario de vigilancia en estas VAP. Antoni Roig apoyó que las multas en estas calles tengan una cuantía mayor de lo normal. No opina igual la coalición de EU-Els Verds, para la que «las sanciones deberían costar lo mismo que en cualquier otra vía, pues ya se supone que se va a multar mucho más». En cambio, también se reivindica la implantación de un horario de vigilancia.