Los diseñadores mallorquines Tolo Crespí y Joana Maria Borràs aportaron ayer su granito de arena a la Pasarela Gaudí, que se celebra desde el miércoles pasado en Barcelona, donde se han congregado los mejores estilistas del Estado español y el sur de Europa para mostrar la moda que se lucirá el próximo otoño. Su ropa para mujer se codeó con las creaciones de, entre otros, Antonio Miró, Armand Basi, Lydia Delgado, Nuria Mora o Peter Aedo. Media hora antes del desfile, Borràs y Crespí no escondían su nerviosismo entre bastidores. El diseñador acudía por tercera vez a Moda Barcelona. Joana se estrenaba en la pasarela catalana.
Crespí fue el primero en entrar, participando en el Espacio Gaudí Diseñadores, dirigido a los más jóvenes. La diseñadora presentó sus diseños un poco más tarde, alardeando de su segundo lugar en el premio Smirnoff, también para estilistas noveles. Mientras la música sonaba, los diseños de Crespí caminaron, acompañados de la ópera «La flauta mágica», de Mozart, siempre con la intención de introducir el sport wear en los vestidos de fiesta, utilizando sedas, aboatados y fieltros, poniendo aplicaciones de plástico muy sutiles.
Fue el penúltimo en salir y su estirada sonrisa mostraba que «este año me ha ido mejor que los anteriores, ya que, gracias a que vine en el 99, pude salir en varias revistas internacionales de moda». Mañana, sin tiempo para descansar, estará en París exponiendo (sin desfiles) ante unos de los escaparates más importantes de Europa: «Es a lo que aspira un diseñador», afirma.