La ciudad de Palma cuenta desde el 1 de enero con 117 policías locales más, no por haberse ampliado la plantilla sino porque los hasta ahora agentes de la ORA, popularmente llamados «oreros», tiene reconocida oficialmente la categoría de policías locales.
Junto a esta nueva categoría, estos 117 agentes estrenan también sueldo y se verán beneficiados de un incremento salarial de 70.000 pesetas al mes. De las 150.000 pesetas que cobraban pasarán a percibir más de 200.000, a lo que debe sumarse el aumento otorgado por Cort a todos los integrantes del Cuerpo Local: 40.000 pesetas brutas al mes en dos años (durante el 2000 serán 24.000 pesetas).
La conversión, aprobada finalmente por la Comisión de Gobierno el pasado 22 de diciembre, supone, pues, la total equiparación de las condiciones laborales y retributivas de estos auxiliares y los agentes. De los 117 nuevos policías, 64 son interinos, por lo que deberán someterse a una serie de pruebas abiertas que se convocarán este año. El resto, que son fijos en comisión de servicio, participarán en un concurso restringido.
Así, a partir de ahora, estos nuevos agentes estarán legitimados para participar en actuaciones de protección ciudadana, regular el tráfico o sancionar infracciones circulatorias, por ejemplo. Aunque, en la práctica, su misión seguirá siendo la misma que hasta ahora, a saber, velar por el cumplimiento de la Ordenanza Reguladora del Aparcamiento y multar a quienes la incumplan.