El año 2000 volverá a ser un año de grandes proyectos para la ciudad de Palma, o al menos eso se espera, pues algunas de las realizaciones previstas no tienen garantizado su inicio a lo largo de los próximos doce meses. Es el caso, por ejemplo, de las obras de remodelación del Moll Vell, que podrían acometerse, o al menos comenzarse, este año o bien demorarse hasta próximos ejercicios. Como se recordará, el pasado año se convocó un concurso de ideas que fue declarado desierto por el jurado, aunque se otorgaron premios individuales.
Un dato a tener en cuenta es que el presupuesto municipal para el año 2000 contempla un aumento del 900 por ciento de la dotación de la partida de Proyectos y Estudios del área de Urbanismo. Una partida que en 1999 estaba dotada con mil pesetas, este año contará con 263.499.000 pesetas. Este dinero será invertido, principalmente, en la realización de los proyectos de la primera fase de la cuña verde.
En efecto, éste que ahora arranca será el año que marque el inicio del proceso para la ejecución de este ambicioso plan. Al respecto, el concejal de Urbanisme afirma que «deberá empezarse por las expropiaciones, y enseguida estudiaremos qué hay de aprovechable en el proyecto ya realizado y, probablemente, se convocará un concurso público para acometer las obras», aunque las obras propiamente dichas puede que no lleguen a comenzar este año.