Los hoteles de cinco estrellas de Mallorca, Son Vida y Formentor, han confirmado una reducción «importante» de sus reservas para Nochevieja, sobre todo, entre sus clientes extranjeros. «Muchos directivos de empresas tendrán que permanecer de guardia esa noche, o deberán estar localizados en su localidad de origen, circunstancia que les ha impedido desplazarse a Palma en estas fechas», explicó el director del Son Vida, Melchor Bosch, quién admitió un descenso del 20 por ciento de la ocupación con respecto al mismo período de 1998.
Algo similar ha ocurrido en hotel Formentor, según afirma su director Sión López. «Tanto hablar del efecto 2000 ha sido contraproducente, porque ha alarmado a muchos de nuestros clientes extranjeros. La ocupación ha sufrido una reducción drástica si la comparamos con la de años anteriores, y sólo han permanecido fiel a su cita, nuestros clientes mallorquines», señaló.
En el Arabella, también situado en los aledaños de Son Vida, las circunstancias son diferentes a las registradas en Son Vida y Formentor, según confirmó una portavoz. «La mayoría de las habitaciones están reservadas por nuestros clientes alemanes, en un «paquete» de Fin de Año que se podía adquirir desde las 500.000 pesetas, cena de Nochevieja incluida», precisó.
Al margen del descenso en la ocupación, otro factor preocupa al sector hostelero mallorquín en estas fechas: las centralitas de teléfonos. Según una auditoría de sistemas informáticos empotrados realizada por la Plataforma Illes Balears Euro 2000, «podrían registrarse algunos problemas en el tránsito al nuevo año» y, por ello, han tomado las precauciones del caso. La auditoría se realizó desde principios de agosto hasta mediados de octubre por un equipo de técnicos de inspección en más de 1.700 comercios de las Islas y en 100 hoteles de Mallorca, 20 en Menorca y 21 en las Pitiusas. Los hoteles con centralitas anticuadas pueden tener problemas, en concreto en todo lo concerniente al tarificador, por lo que verán distorsionado este servicio y no se podrán realizar llamadas telefónicas.