La Autoritat Portuària inició ayer por la mañana las obras de ampliación de la acera del lado de las fachadas del Passeig Marítim, obra con la que se pretende alinear su anchura, ahora muy irregular, con el tramo más ancho que mide cerca de cinco metros.
Este proyecto debería haberse empezado a ejecutar en abril, pero a petición de la Asociación de Comerciantes e Industriales del Passeig Marítim se retrasó hasta octubre, y los cambios políticos vividos por el Puerto han demorado hasta ayer el inicio de los trabajos.
Las obras tienen un periodo de ejecución de seis meses y abarcará desde la calle Monseñor Palmer hasta s'Aigo Dolça. Pero, también en consenso con los comerciantes, se ha acordado realizarla por tramos. para evitar al máximo las molestias. Así, el primero va desde Monseñor Palmer hasta el hotel Bellver. Además, está previsto paralizar los trabajos del 20 de diciembre al 9 de enero, ambos inclusive, con motivo de las fiestas navideñas. Los peatones podrán seguir caminando, pues se dividirá la acera en dos, para dejar una parte libre.
Para alinear la acera se eliminará el aparcamiento en cordón que existe en la mayor parte del tramo afectado, con lo que el Passeig Marítim perderá unas 74 plazas de aparcamiento. Para compensar, se retocará el aparcamiento de la acera contraria, de modo que se pueda aparcar en sitios donde ahora está prohibido y en otros puntos donde ahora se aparca en cordón se podrá estacionar en batería. Con ello y con la construcción de un parking subterráneo previsto en la calle Marqués de la Cenia se calcula que se cubrirán las necesidades de la zona.