El trasatlántico Rotterdam, buque almirante de la legendaria naviera Holland America Line, recaló el pasado martes en Palma. El lujoso crucero de 60.000 toneladas de registro llegó con 1.600 pasajeros en su mayoría norteamericanos, en ruta de Villefranche (Riviera francesa) a Almería. Desde la mañana hasta la tarde recortó su impresionante línea ante el fondo de Bellver.
Este buque encabeza en la actualidad una flota de diez superliners y está considerado como uno de los más selectos del mundo y los precios para unas vacaciones en el mar de diez días a bordo oscilan entre el medio millón y el millón y medio de pesetas. Su entrega, a cargo de los astilleros italianos Fincatieri de Monfalcone, se realizó hace apenas dos años y desde entonces ha realizado su crucero más largo, la vuelta al mundo, que lleva a cabo a una velocidad de 25 nudos.
Sus instalaciones son comparables a un gran hotel de máximo nivel y la decoración se inspira en los grandes paquebotes históricos de la compañía. A bordo, sus pasajeros disfrutan, entre otras instalaciones, de numerosos apartamentos con terraza privada, un restaurante panorámico a popa con doble altura e información digitalizada, así como otros servicios complementarios. Se trata de una embarcación de lujo que recaló en Palma ofreciendo a los palmesanos una imagen única de su línea ante Bellver.