Los vecinos de la zona en donde se concentran los pubs y discotecas de Sineu protestan por las molestias que les causan estos establecimientos. Los afectados afirmaron que están hartos del ruido que producen estos locales, pero sobre todo por la cantidad de gente que se concentra en estas zonas los viernes y sábados por la noche. Según datos de la Policía Local, la afluencia de visitantes supera las 2.000 personas cada fin de semana.
Los vecinos expresaron estas quejas al alcalde de Sineu, Pep Oliver (UM), y al concejal de Policía Josep Oliver (PP), durante una reunión que tuvo lugar en la Alcaldía anteanoche. Los mismos vecinos expusieron sus quejas ante la próxima apertura de un nuevo local de estas características, cuyo proyecto ya está en el Ajuntament.
El alcalde se comprometió a aumentar la vigilancia policial y también dijo que conminará a la Guardia Civil para que incrementen los controles de alcoholemia. «Esta no es la mejor solución y creo que los pubs deberían colaborar pero no se les puede obligar», comentó el batle, que no descarta adelantar la hora de cierre de estos locales si el problema no se soluciona.