La evolución de la coyuntura económica durante este verano y en el acumulado enero-agosto se ha saldado con un crecimiento económico del PIB del 3'3% en los meses punta y de un 7'4% en el acumulado del actual ejercicio económico, teniendo en el sector de la construcción su máxima expresión, según explicó ayer el director del Departamento de Economía y de la Obra Social y Cultural de Sa Nostra, Miquel Alenyar.
Por sectores productivos, la construcción es el que mayor alza ha registrado en los ocho primeros meses del año, con un 13'8%. Alenyar indicó que este crecimiento de la construcción es sostenible siempre y cuando tenga por objeto la remodelación, rehabilitación, mejora y embellecimiento, pero no si implica la ocupación de más territorio: «Son por ello oportunas y necesarias las medidas de urgencia adoptadas por el Govern para frenar la presión urbanística en las Islas, pero también es cierto que existe un déficit de viviendas modestas y listas de espera existentes para viviendas urbanas con un precio de entre 14 y 15 millones de pesetas», afirmó Alenyar.
Todo esta está en relación con la evolución que ha tenido este año el consumo privado, que en los meses de julio y agosto alcanzó el 5'1%, «el más alto experimentado en los últimos cinco años, y ello demuestra la confianza de los consumidores en la marcha de la economía y el aumento de la ocupación. Desde 1990 no se había alcanzado un nivel tan elevado. La gente gasta más porque se siente más segura con la situación económica».
En cuanto al debate sobre una posible implantación de un impuesto turístico en Baleares, Miquel Alenyar no quiso pronunciarse por considerar que hay que analizar el tema con «serenidad. Esta cuestión se tiene que analizar teniendo en cuenta el superávit fiscal que Balears genera a la administración estatal, que cuantificó de entre un 8 y un 9% del PIB balear, que en el 98 alcanzó los 2'6 billones de pesetas».