Jaume Matas no renuncia a integrar a todos los sectores del PP en la ejecutiva que saldrá del próximo congreso regional, que se celebrará el dos de octubre. Matas espera contactar en los próximos días con Catalina Cirer, que se convirtió en agosto en la portavoz del sector «cañellista», para convencerla a que se incorpore a su equipo directivo. El aspirante a presidir el PP "el único que ha anunciado su intención de hacerlo hasta ahora después de intensos movimientos durante el mes de agosto" también mantendrá un encuentro con el sector crítico para «escucharles» de cara al próximo congreso. «Hay que tener en cuenta en este partido a todas las sensibilidades y nadie debe quedar fuera», recalcó ayer Jaume Matas, quien se mostró muy satisfecho por el proceso de elección de los compromisarios. Los críticos del PP ya presentaron una candidatura alternativa en un congreso insular contra la lista de Cañellas, y obtuvieron el 30 por ciento de los votos, lo que supuso un importante revés para el ex presidente.
Matas todavía no ha elegido a la persona que ocupará el puesto de secretario general del PP, aunque sí tiene perfilada la estructura de la nueva ejecutiva. El futuro equipo directivo será más amplio que el actual y la principal diferencia es que en la futura ejecutiva habrá coordinadores de área, elegidos por el presidente del PP, así como secretarios de área. Los coordinadores de área no serán vocales de la ejecutiva "no serán elegidos por el congreso" pero tendrán voz y voto en el equipo directivo, mientras los secretarios formarán parte de la junta regional. Estos coordinadores se encargarán de las distintas parcelas de gestión del partido, y estarán en permanente contacto con el presidente del PP. Jaume Matas también quiere que las juntas locales tengan un mayor peso específico en el partido.